lunes, 12 de octubre de 2015

SOÑAR CON LA MUERTE-PRIMERA PARTE



SOÑAR CON LA MUERTE SUELE INDICAR EL FIN DE UN CICLO PARA DAR COMIENZO A OTRO



        Hola, amigos, espero, como siempre, que todos se encuentren bien y sobre todo, que mi material les sea útil. En este caso, la interpretación de sueños, suele convertirse en algo muy valioso a la hora de iniciar un emprendimiento o tomar una decisión. Por si no lo saben, les comento que mientras dormimos, la mente no deja de funcionar en el sentido, más allá de lo estrictamente biológico, en el sentido síquico…es decir, sigue buscando soluciones o salidas a determinados problemas que nos preocupan mientras permanecemos despiertos. No pocas veces, ha sucedido que, no sólo se han solucionado determinados problemas sino que también algunas personas han despertado con la solución a fórmulas complicadas que les han permitido llevar a cabo inventos geniales, con los que la humanidad se ha beneficiado largamente.
        Bueno, hoy les traigo un tema muy polémico en el campo de los sueños: soñar que morimos… Ustedes, como tantos se preguntarán: “¿será que pronto he de morir?, ¿será que una enfermedad lenta y traicionera está invadiéndome de a poco?.
        ¿Qué suspenso eh?.  Bien, no implica una muerte próxima, es decir, generalmente. Y por suerte, en la mayoría de los casos, este tipo de ensueños no tiene que ver con la muerte física del soñador. ¿Con qué tiene que ver, pues?. Este tipo de sueños posee, una amplia gama de significados y muy raras veces anuncia una muerte próxima en el plano de nuestra existencia cotidiana.
        Además, como sucede casi siempre con estos temas que no obedecen a interpretación por fórmulas exactas, hay una parte de los conocedores en el campo de lo onírico que dicen que casi nunca se sueña con la propia muerte debido a algo básico: nuestro instinto de conservación no nos permite soñar con nuestro final…En eso disiento ampliamente ya que, cuando tenía apenas unos quince años, soñé que asistía a un funeral, el ataúd se encontraba cerrado pero yo sabía que ahí dentro me encontraba yo…
        Soñar con nuestra propia muerte generalmente indica que estamos eliminando una parte de nuestro yo, un aspecto de nuestra personalidad o una costumbre que deseamos desechar.
        Mayormente, soñar con la muerte indica superación de una parte de nuestro yo (hábitos, formas de pensar) que de alguna manera resultan perjudiciales en nuestra vida… (comer en exceso, fumar demasiado, beber más de la cuenta) como así también rasgos de personalidad que no ayudan en nuestro camino de la existencia: ansiedad, impaciencia, falta de tolerancia ante quienes no piensan como nosotros…en fin, la lista es larga. De todos modos la idea tiene que ver con el comienzo de un nuevo ciclo.
        Así como en el Tarot, el Arcano Número XIII La Muerte no significa la muerte física real del Consultante, acá es lo mismo. El Arcano de La Muerte implica, cuando sale en la tirada, el comienzo de un nuevo ciclo…muerte, final de un período para darle lugar al comienzo de otro.
        Si durante el transcurso del sueño sentimos pena o rechazo, probablemente se trate de que, de alguna manera, esté muriendo un rasgo bueno de  nuestra personalidad, o que nuestro descuido provoca que se pierda o se estanque alguna habilidad. También puede significar que se avecina algún problema de salud debido a hábitos insanos en nuestro estilo de vida-
        Debemos tener en cuenta cuáles son nuestros sentimientos durante el transcurso del sueño…aunque estemos soñando algo bello, si ello nos despierta, miedo, inquietud o tristeza, presagian algo desagradable ya que el resultado final del ensueño a nivel profético,  se encuentra en consonancia con nuestros sentimientos. Por el contrario, aunque el escenario no sea del todo bello, si estamos bien predispuestos o sentimos algo agradable, su significado final en el campo de la existencia cotidiana, será bueno.
        Por otro lado, si la persona que sueña tiene algún problema de salud, este sueño podría estar avisándole que tome precauciones, es decir, que se haga algún chequeo o consulte al médico. Si el sueño es reiterativo debemos hacer hincapié (si existe un tema de salud en el plano real) en visitar al médico.
Suicidio:
        Podría significar que nos estamos matando física o emocionalmente debido a malos hábitos, demasiado trabajo o muchas preocupaciones. También podría tratarse de alguna adicción que nos está haciendo mucho daño.
        Este sueño nos dice que posiblemente estemos teniendo una visión algo pesimista de nuestra vida o que no estamos conformes con alguna de las situaciones por las cuales estamos atravesando en la realidad, lo mismo se interpreta para cuando soñamos con alguien conocido, amigo o familiar que intenta suicidarse.
Personas queridas que nos dicen que se van
        Puede suceder que en algún sueño, una persona querida se nos acerque y nos diga que pronto abandonará su cuerpo físico…Pueda que alguien querido aparezca en nuestros sueños y nos diga: “Me voy” pero esto no sucede muy a menudo, ya que las señales suelen darse en el habitual lenguaje simbólico de los sueños situaciones apenas perceptibles que pintan el futuro con más sutileza…¿cómo?, por ejemplo soñar que la citada persona aborda un transporte pero no lleva equipaje o, que estén caminando junto a nosotros pero en algún momento del sueño se nos separen  y nos dejen con la sensación, el sentimiento profundo de tristeza porque no los veremos más.
 A este respecto tengo un claro ejemplo que me ha sucedido con un sueño y se cumplió al pie de la letra…en cuanto a la interpretación que hice yo de tal “guión”: hace algunos años soñé que una mujer, compañera de mi padre en el trabajo de toda su vida, quien en ese momento estaba viva y ya jubilada, se encontraba en mi casa…yo llegaba de la calle y me sorprendió ver que mi padre, ya fallecido hacía un tiempo para estos momentos, se encontraba presidiendo una mesa de fiesta con todos otros compañeros de trabajo fallecidos hacía ya bastante. Inmediatamente, y aún dentro de los límites del sueño, percibí algo raro: esta mujer no estaba muerta, todos los demás sí. Entonces sucedió algo: Ninguno de los comensales me registró al llegar yo a mi casa, ni siquiera mi padre…era como si yo realmente no estuviese ahí… En realidad los que no estaban ahí eran todos ellos…ya se habían marchado hacía rato. En cambio Katy, la señora en cuestión, me vio, se levantó, me saludó, aunque no me invitó a que me quedara a compartir aquella mesa.
Cuando desperté, lo primero que pensé fue que Katy – o había muerto hacía poco o bien estaría pasando por un peligro de muerte. Tal interpretación surgió del hecho de que ella estaba compartiendo, formando parte de un grupo de personas, todas fallecidas, pero, por otro lado, también  compartió algo conmigo, lo que me decía a las claras que todavía estaba acá…que de algún modo pertenecía aún a este plano. El hecho de que no me invitara a sentarme con ellos, me dejaba afuera de cualquier duda razonable con respecto a que yo fuera a irme de manera inminente…
Apenas fui a la oficina, le pregunté por ella a una compañera de trabajo que aún tiene estrechas relacione con Katy y me confirmó que estuvo muy grave debido a un problema  intestinal, que la operaron, atravesó ciertamente una situación crítica y luego se restableció.
Para que se familiaricen un poco con la forma en que opera el lenguaje simbólico de los sueños les transcribo un párrafo de la Leyenda: El caudillo de las manos rojas” de uno de mis autores predilectos, Gustavo Adolfo Bécquer: “Los sueños son los espíritus de la realidad con la forma de la mentira; los dioses descienden en ellos hasta los mortales y sus visiones son páginas del porvenir o recuerdos del pasado.” Está tan perfectamente explicado que creo que no hacen falta aclaraciones…
Bueno amigos, por hoy llegamos hasta acá. En mi próxima entrega veremos la Segunda Parte de Sueños de Muerte: Símbolos de Muerte y varios significados adjuntos más para este tema, incluído el Sueño con el Angel de la Muerte. Como siempre, los invito a dejar sus comentarios o hacer alguna consulta a través de la página de mi blog o enviarme un e-mail a: profesora_1954@hotmail.com. Gracias y hasta la próxima.

viernes, 2 de octubre de 2015

El VIAJE ASTRAL



VIAJE ASTRAL: SEPARACIÓN DEL CUERPO ASTRAL Y EL CUERPO FÍSICO MIENTRAS DORMIMOS

        Según se ha dicho por ahí, “lo prometido es deuda”, por lo tanto acá vuelvo en esta entrega con este tema sobre el que seguramente han oído hablar mucho pero del que  pocas personas saben demasiado…

       Se le llama Viaje Astral a un fenómeno que sucede generalmente mientras dormimos y que consiste en la separación entre la conciencia o cuerpo astral, también llamado cuerpo de emociones y el cuerpo físico. Ambos cuerpos quedan unidos - durante este fenómeno – por el llamado “cordón de plata” que se prolonga indefinidamente mientras permanecemos afuera.

        Este proceso que, como les decía anteriormente, sucede generalmente durante el sueño, puede, no obstante,  ser provocado concientemente estando despiertos y es algo muy similar a lo que sucede cuando morimos. Cuando se produce la muerte el cuerpo astral abandona definitivamente al cuerpo físico, que fuera su receptáculo en vida pero en el viaje astral, el cuerpo de deseos sale del cuerpo físico y luego vuelve...

        Una de las formas en que esto sucede es por ejemplo, durante una intervención quirúrgica, debido generalmente al efecto producido por la anestesia u otras drogas en el organismo. Debido a esto se produce el llamado “desdoblamiento”. En otras ocasiones se produce una muerte clínica y luego la persona vuelve. En ambos casos abundan relatos de corte parecido: las personas que han pasado por esta experiencia han relatado haberse visto de pronto flotando sobre sus cuerpos, por la habitación o la sala de operaciones, han escuchado a los médicos hablar sobre ellos al tiempo que realizaban esfuerzos para traerlos nuevamente a la vida.

        En otros casos el desdoblamiento se produce durante el sueño, de una manera inconsciente, no provocado ni mucho menos dirigido. Pero luego se lo recuerda porque estos sueños astrales poseen ciertas cualidades que los diferencian de otros sueños comunes: las imágenes son brillantes, coloridas y nítidas y tendemos a recordarlo todo una vez que despertamos... Algunas personas tienen la facultad de darse cuenta de que se encuentran en el medio de un sueño particular y, por así decirlo, toman la iniciativa y pueden ir adonde ellos lo deseen. Pero no es tarea fácil darse cuenta de que estamos en medio de un sueño astral, de una salida real y lleva cierto entrenamiento lograrlo.

        Por último existe otra forma de lograr la salida astral y es lograr que el cuerpo físico duerma mientras la mente permanece despierta, completamente lúcida. Como se imaginarán, existen cientos sino miles de técnicas destinadas a lograr este estado pero, básicamente, todo consiste en la relajación total del cuerpo físico evitando dormirnos, o sea, hacer que la mente permanezca despierta. La relajación se logra mediante un entrenamiento adecuado de la respiración ya que al entrar en el estado alfa (beta es el estado consciente de la mente), se produce una expansión de la conciencia y se logra la salida.

        Esta forma, provocar una salida o desdoblamiento consciente, es la mejor, ya que, una vez producido, nos es posible dirigirnos a donde deseemos ir porque, como dije anteriormente, en su gran mayoría, si salimos durante el sueño, resulta muy difícil darnos cuenta y no podemos dirigirnos adonde lo deseamos.


¿A dónde podemos ir?

        Podemos ir básicamente a donde lo deseemos. El cuerpo emocional o astral puede atravesar cualquier obstáculo o distancia. En realidad nos estamos moviendo en la llamada cuarta dimensión, donde no rige la cuestión espacio-tiempo en la que se mueve habitualmente el cuero físico.

        Además de los lugares geográficos imaginables, incluido cualquier sitio conocido o no del Universo…planetas, estrellas, se pueden visitar diversas zonas del astral…por ejemplo, ha sido tema recurrente de los relatos de personas que han pasado por esta experiencia, contar que han visitado a sus seres queridos que ya han partido. Debo sin embargo comentar que algunos estudiosos del tema han puesto ciertos límites en lo que  se refiere a visitar planos astrales demasiado elevados (Dios, los ángeles) o, por el contrario, muy bajos (el infierno, hablando en términos tradicionales). ¿Por qué?, sencillamente porque la mayoría de nosotros no somos lo suficientemente buenos o malos como para poder acceder a estas dimensiones…



DURANTE EL TIEMPO QUE DURA EL VIAJE ASTRAL PODEMOS IR A CUALQUIER SITIO DEL UNIVERSO...






     

TAMBIÉN PODEMOS VISITAR LUGARES GEOGRÁFICOS POR MAS LEJANOS QUE SE ENCUENTREN...

           De hecho, muchas veces sucede que soñamos con alguna persona querida y, por ciertas características del ensueño, nos damos cuenta de que hubo un encuentro real, que lo que tuvimos fue, en realidad, un sueño de proyección astral. Con respecto a este tipo de sueños que implican una proyección no dirigida tengo una experiencia personal que a continuación les relataré:

           Cuando yo contaba con mis veintitrés años sufrí la pérdida de una amiga muy querida. Al fallecer en un accidente, su partida fue muy traumática al punto de que movilizó y transformó mi escala de valores y de creencias. Era la primera vez que me enfrentaba con una muerte no lógica (enfermedad, vejez…) y lógicamente surgieron los interminables porqués…

        Después de este caos inicial que me provocó su partida quise soñarla pero no lo lograba. Dicen que el inconsciente es caprichoso y cuanto más uno insiste en querer soñar con algo o alguien menos lo logra…Fue así que pasado un tiempo, una noche, de pronto me encontré dentro de un ensueño. Había yo escalado un gran paredón y al llegar arriba, del otro lado estaba mi amiga que me miraba y sonreía con una especie de mal contenida tristeza…

SOÑÉ ENTONCES QUE ESCALABA UN GRAN PAREDÓN, SÍMBOLO ONÍRICO INEQUÍVOCO DE LA MUERTE...

        Diana, que así se llamaba, me tranquilizó diciéndome que se encontraba bien ahí, en un lugar bello pero solitario, triste, con muchas flores y verde…pero se encontraba sola… No me reveló mucho acerca de dónde se encontraba  ni qué hacia ahí…me daba la impresión de que medía mucho sus palabras porque quizá, no le fuera permitido revelar gran cosa.

        Yo, por aquellos días me encontraba en vísperas de viajar a Bariloche y ella entonces, me remarcó muy seriamente que por ningún motivo subiera a ese avión.

        En un momento dado, yo – que me encontraba separada de ella debido 
al ancho paredón – (paredón que en el lenguaje simbólico del sueño no era otra cosa que la muerte) – en un momento dado, intenté saltarlo para estar con ella del otro lado. Entonces sucedió algo que nunca olvidaré: Su rostro reveló una mal contenida desesperación, cosa rara en su temple siempre apacible. Extendió la mano para detenerme en mi intento y tocándome (al día de hoy después de tantos años recuerdo la impresión de su mano sobre las mías) me dijo: ”No, no, no…faltan muchos años todavía…”.



ELLA SE ENCONTRABA EN UN BELLO SITIO LLENO DE FLORES PERO INDUDABLEMENTE TRISTE Y SOLITARIO...
        Me desperté con la real sensación de haber estado en verdad con ella. El paseo a Bariloche lo suspendí -  un poco por su aviso - y otro poco por ciertas cosas que sucedieron en ese ínterin…de modo que no abordé ese vuelo que se estrelló a la entrada de  Bariloche y no hubo sobrevivientes…

        Demás está decir la impresión profunda que me causó todo esto. Desde ahí supe que “del otro lado” había algún sitio que quizá visitamos en sueños…indudablemente, hay algo más…


        Hasta la próxima, espero que les haya gustado la entrada. Como siempre, están invitados a comentar en la página o a mandar un e-mail a profesora_1954@hotmail.com


ME DESPERTÉ CON LA SENSACIÓN Y EL CONVENCIMIENTO DE QUE MAS ALLÁ DEL MUNDO VISIBLE, INDUDABLEMENTE EXISTE ALGO MÁS...